"Quienquiera que seas, alguna noche da un paso y sal de tu casa, que conoces tan bien.
Allí está el espacio enorme, tu casa yace donde él comienza".
Rainer Maria Rilke


viernes, 24 de junio de 2011

Discursos que nos constituyen...los niños y nuestros decires y maldecires

No hay dudas de que las palabras  constituyen el modo más efectivo e interesante de comunicación entre las personas así como también la fuente más intensa de ambigüedades y malos entendidos; asumir una actitud responsable por aquello que expresamos a través de las palabras en relación a otros y también en relación a nosotros mismos, implica ser conscientes del carácter de marca que tiene cada palabra y enunciado,  en nuestras vidas y en las de los demás.
Nos constituimos como humanos siendo nombrados y hablados por otros, que con sus historias de amor y desamor nos alojan, o no, apenas nacemos y aún antes de nacer. Así vamos habitando nuestro cuerpo y los diferentes espacios que comenzamos a andar.
 En cada palabra, en cada mirada, en cada gesto, en cada abrazo vamos asumiendo una identidad que nos asemeja  a otros y también nos diferencia.
  A modo de faro, estas palabras ajenas nos constituyen, orientan los caminos a seguir , el modo de hacerlo, nos brindan seguridad y pertenecia.
Sin embargo muchas veces dichas palabras, también etiquetan y determinan caminos de malestar y padecimiento.
“Es miedoso”, “es igual a mi”, “es lento”, “es gordo y grandote”, “llorón”,  “ADD”, son sólo algunos de los enunciados que operan como marcas signado destinos, modos de ser y estar en el mundo, con muy poco margen, a veces, para despegar.
Cierto es que las categorías organizan, ordenan y sistematizan conceptos, pero a la hora de pensarnos humanos y en relación  con otros, estas categorías obturan, cierran posibilidades, clausuran la libertad de elegir, de recorrer otras rutas, de cambiar, de  probar y asumir por fin el deseo de ser quienes deseemos ser trascendiendo mandatos en los que la mayoría de las veces, no encajamos, precisamente porque no son nuestros.

Entonces, en esta danza que se produce cuando nos  disponemos a criar, a acompañar, a enseñar, a hablar con nuestros niños y niñas, es conveniente desarrollar especialmente nuestra capacidad para escucharlos, mirarlos , recibirlos y respetarlos en su singularidad. ejercer la empatía de ponernos “en sus zapatos” evocando nuestra propia infancia y los enunciados que nos marcaron funcionando muchas veces a modo de sentencias.
Ejercitarnos en el diálogo, en propiciar pausas y silencios para que el otro sea, se exprese, interpretar aquello que creemos quieren decirnos, pero no desde la “loca certeza” de un saber total sino desde la oportunidad de brindarles opciones, sentidos posibles que los animen a tejer su propio universo, tejido, por supuesto, en una trama colectiva y social    pero con el color y la textura de un hilo personal, único, capaz de hilar tramas creativamente nuevas.
A menudo recibimos a nuestros pequeños alumnos anticipando saberes o hipótesis acerca de qué son y no de quiénes son ( inquieto, desatento, impulsivo, inmaduro, brillante, “aparato”, genio); esta sutil diferencia  es en realidad menos sutil que lo que gramaticalmente parece en tanto, por un lado objetiviza lo que debiera ser singular y subjetivo, y por otro marca  también modalidades muy diferentes de abordaje.
Cuando un niño se convierte en sindrome ( por ejemplo),  solemos perder de vista aspectos vinculares como  la empatía y la compasión, para acentuar estrategias de intervención que los anudan a categorías , a “no lugares” de los cuales  se hace difícil salir .

La escucha como llave....

Cuál es entonces, la puerta que se abre o se cierra....? la del universo interpretativo del que habla..., del que se habla...
que, en su decir mismo, define, diseña , crea su futuro...
o lo clausura.
Entonces,  la Escucha, escucharse, ser escuchado son llaves que abren la posibilidad  de nuevas y diferentes interpretaciones,
 y también las Palabras..., decir, decirse, decirles a otros
cada palabra como acción generadora de realidad
cada palabras como herramienta constructora de presente, de futuro,
y por qué no, también de nuestro pasado, si nos animamos a reinterpretarlo desde otra perspectiva...

martes, 14 de junio de 2011

Solo se trata de elegir....

"El liderazgo no es una posición, sino una elección..."
                                                                 Stephen Covey
.... De asumirnos responsables, que no es lo mismo que andar cargando culpas...,
    de hacer del crecimiento y el refinamiento un hábito...,
    de honrar el verbo en cada acto,
    de crear, en fin, contextos para que los otros florezcan...
    y uno también...
    Así, tal vez el mundo sea un mejor lugar para todos.

lunes, 13 de junio de 2011

Acerca de saberes, no saberes y lo que nos sorprende

"Saber no es tener respuestas, es atreverse a tener preguntas..."
                                                                                         Julio Olalla

Cuestionar los propios saberes. Indagar las palabras de siempre, animarse a profundizar  la emoción  e interrogarla a la luz de una historia, la nuestra, es siempre revelador si nos animamos a trascender dichos discursos,  y a actualizarlos asumiendo el compromiso de la transformación con nosotros mismos y con la vida.
Así aprendemos... nos enfrentamos al misterio, a la novedad, al gozo de reconocernos recién paridos celebrando pensar lo que nunca pensamos.

domingo, 12 de junio de 2011

Lo posible

"Sabemos lo que somos, pero no sabemos lo que podriamos ser"
                                                                                                    Shakespeare

... Conviene entonces comenzar a jugar nuevas palabras que dancen al son de posibilidades,  desechando del decir propio otras, temerosas pero no menos propias, que las aplasten... que nos acallen.
Nuevos decires nutren nuevas realidades, palabras generadoras, amantes de lo posible, siempre infinito.

sábado, 11 de junio de 2011

El inicio

Quienes acompañan y enseñan a otros devienen lideres que orientan y guían procesos de desarrollo, crecimiento y autonomía. Es importante, por eso, que dichos conductores desarrollen como condición previa la capacidad de liderarse a si mismos a través de un sistema en el cual pensamiento, emoción, acción, y palabra evidencien coherencia y fluidez.
La capacidad de escuchar e indagar es la herramienta mas poderosa que tiene el coach para entrar respetuosamente al universo del coachee con el fin del conmoverlo y cuestionarlo, no desde las propias creencias y valores sino en aquellas creencias y valores que el coachee mismo posee y que funcionan muchas veces como obstáculos y barreras al crecimiento y despliegue de su potencial humano.
Así pues...
-Empoderar,
-acompañar en la búsqueda y el encuentro de nuevas posibilidades,
-deconstruir y reconstruir creencias y valores,
Son tareas con las cuales el coach se compromete desde una perspectiva ética para que el otro se lance a soñar sus propios sueños y logre realizarlos.